miércoles, 11 de noviembre de 2015

Berenjenales.

'Y no parece estar tan mal, no parece estar tan rota aunque sé que es su forma de sobrevivirse. Pero no me importaría seguir mirándola de lejos, acariciarle el pelo cuando pase y repetirle mil veces que me encanta ver sus mejillas al sonreír. No me importaría recostarla a mi lado, besar su mejilla y verla caer rendida, durmiendo, como si no importara nada más. Sé que ella necesitaba ese apoyo, y de algún modo o quise estar ahí. 
 Pero hay berenjenales que es mejor no pisar.'

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