Y de cuentos que no existen.
Ahora olvida todas esas sensaciones, todas esas ilusiones que que treparán hasta tu ventana para verte dormir. Olvida que encontrarás frases y poesía en el rincón más inesperado, olvida las sorpresas creadas con la mágica ilusión de quién cree amar. Olvídalo. Porque si caes no estará su mano, si lloras no estará su hombro. No luchará contra dragones por ti, no vencerá a la muerte con un beso, no secará tus lágrimas ni te hará promesas eternas. No, aquí no. Aquí sólo cuenta el momento exacto, el instante preciso en el cual haces lo correcto. Si te equivocas no habrá nada que te salve, si fallas se acaba el juego. Porque aquí no hay princesas que besen sapos ni príncipes que asalten castillos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario